lunes, 15 de noviembre de 2010

tangible ausencia












Volver a mi viejo dolor inacabable, sin desenlace. Temía quedarme sin un imposible. Y lo hallé, claro que lo hallé.

Tangible Ausencia
Alejandra Pizarnik

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Así nomás es la cosa. Sí, esa es la vedadera muerte o la definitiva: cuando ya nadie te recuerda.
Por eso, cuidadito con creer en la posteridad, que dura lo que dura y nada más.

Anónimo dijo...

KR

Luciano Contreras dijo...

no había visto este comentario, hasta casi cuatro meses después...tranquilo, sé lo de la posteridad.

un abrazo. no sabes cuánto me gratifica saber que estamos en esto aún...